Las fotografías de naturaleza y más tarde otras con detalles navideños querían servir como motivo para expresar momentos de meditación, instantes en los que el corazón se llena de pureza permitiendo descubrir al prójimo a nuestro lado; y que la vida es un camino que vale la pena compartir, con una relación personal que genera lo que puede llamarse "sendas de unidad".
La idea de la relación con la Naturaleza, desde la admiración, el respeto, la Belleza y la gratuidad de lo creado; todo ello trasladado a las relaciones entre los seres humanos, comenzando por los más cercanos.
Y una actitud: vivir bien el momento presente, consciente de cada paso en la senda propia en el camino hacia un mundo más fraterno y más unido.
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